Austria considera al líder de la extrema derecha para formar gobierno
El panorama político en Austria ha experimentado una sacudida significativa tras el anuncio del presidente Alexander van der Bellen, quien se reunirá con Herbert Kickl, el líder del Partido de la Libertad, en lo que podría ser el primer paso hacia la formación de un nuevo gobierno. Esta reunión se da en un contexto donde el canciller Karl Nehammer ha manifestado su intención de renunciar, después de que fallaran las negociaciones para una coalición con los socialdemócratas.
La presión ha aumentado sobre el Partido Popular, al que Nehammer pertenece, ya que las elecciones recientes posicionaron al Partido de la Libertad en la delantera con el 29,2% de los votos. Aunque Nehammer seleccionó a Christian Stocker como nuevo líder interino del partido, el presidente insinuó que se han suavizado las posturas en torno a la posibilidad de colaborar con Kickl.
El clima político se ha vuelto tenso después de que el partido liberal NEOS se retirara de las conversaciones de coalición. Van der Bellen ha hecho frente a críticas por no ofrecer primero el mandato a Kickl para formar gobierno, considerando su éxito electoral. Esto sugiere un cambio posible en la dirección política de Austria, con Kickl pidiendo un lugar central en el manejo del gobierno a pesar de su imagen controvertida y sus propuestas polarizadoras.
